viernes, 5 de septiembre de 2014

Una Mano

Ayer, una de las personas que Amo en esta vida, me hizo ver que esto lo debo compartir…es algo para mi maravilloso y que agradezco a Dios, porque ha sido, es y será una bendición…


En esta Montaña Hermosa de la Vida, que he tenido la fortuna de ir conociendo, sintiendo, experimentando, atesorando, soñando y aprendiendo…por veintinueve años… siempre en mi camino hubo una mano extendida, dispuesta a caminar conmigo.

Una mano extendida, que verbalmente no pedí, pero la necesitaba y todos y cada uno de ellos me la dieron sin condición y con todo el Amor del Mundo. Desde ese instante tienen mi lealtad y comparto y dedico a ustedes mis Alegrías.

Ahora soy capaz de ver que a través de cada uno de ustedes…al regalarme un juguete, al cuidarme por las tardes, al entregarme un cuaderno, al ayudarme con las tareas, al compartir su experiencia y decirme “si se puede”…Era Dios quien me extendía su mano, para que la tomara y continuara caminando.

Pensé absurdamente, en enumerarlos, desafiando mis recuerdos, pero ahora comprendo que no es necesario, porque somos todos parte de un infinito Amor y si hay algo que cada uno de nosotros tiene para entregar…es una mano entendida que forma una cadena, de eslabones gruesos…que nos permite ver lo Hermoso de esta Montaña…

¿te quieres sumar?

Un Abrazo Loreto

lunes, 16 de junio de 2014

El Verdadero Amor

A lo largo de nuestras vidas, experimentamos distintos tipos de amor…algunos pasan desapercibidos, hasta que los perdemos; otros siempre nos han acompañado; unos más intensos y apasionados otros pasajeros o fugaces…algunos nos han causado profundo dolor, pero con los años comprendemos lo valioso que nos entregaron. Así transcurre el tiempo hasta que Dios y la Vida deciden entregarnos el más profundo Amor…

La espera en ocasiones se torna interminable y crees ya sentir mucho…pero nada se compara al día de su llegada :)…ver que un ser tan pequeñito, te mira con sus ojitos llenos de ti, de tu voz, de tu olor, de la textura de tu piel…que no necesita hablar, porque con sólo estar entre tus brazos, te ha dicho mucho más de lo que todas las personas que has conocido a lo largo de tu vida te han dicho… mirar a tu compañero de vida y comprender que juntos fueron capaces de crear un ser perfecto, compartiendo el mismo sentimiento hacia él…

Es ahí cuando sentimos el más Puro, Sincero, Leal, Incondicional, Sublime y Eterno de los “Amores”…o para algunos El Verdadero Amor.

Luego de eso comprendes que si es necesario ir a la Luna y regresar, porque una piedra lunar le hace Feliz, e motivo suficiente para hacerlo…

En ese mismo instante la Vida te entrega tu investidura de Guerrero, capaz de derrocar a cualquier dragón, monstruo o persona, que ose siquiera pensar en hacerle daño, ante el cual no habrá clemencia ni piedad.

Siéntanse y Vivan lo afortunados que son, pues el corazón y el cuerpo se tornan diminutos para albergar tan inmensa Felicidad.

A todas las Madres y Padres que conozco, mi más profunda admiración, pues se que Dios les entregó su más Hermosa Bendición.

martes, 28 de enero de 2014

Con una pala al Hombro

Con una pala al hombro, sacando día a día un poco de Tierra…cavando su propia tumba, van a Trabajar…
Quisiera poder tocarlos, para hacerles recordar lo mucho que contribuye su trabajo en uno o varios de sus objetivos de vida; vivir tranquilo, educar a sus hijos, hacer Familia, pagar su casa, en fin…
Ignorando todo aquello, este último tiempo se han concentrado en llegar tarde, en descuidar su presentación personal, en contestar mal, en desaparecer en horario de trabajo y en cien cosas más, cavando su propia fosa, que lejos de contribuir con su objetivo personal, lo merman.
Sé que somos pocos los que tenemos la fortuna de disfrutar lo que hacemos, pero también creo que gran parte de esa Alegría la entrega el tener siempre presente que “el trabajo es un medio para”…no un fin…
En el trabajo existen miles de ojos que observan con detención cada movimiento y que pueden ser tu mejor aliado o tu verdugo al momento de enfrentarse a una oportunidad. Despeja de tu camino todo lo que merma tus objetivos, pues te parecerán detalles, pero la habitualidad con la que los haces, los han transformado en una cualidad negativa.
Pregunto entonces: ¿tu trabajo es un medio para?: